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::::: Una iniciativa para difundir :::::
Hace varios años en la República Argentina, según el expediente 84056/56 del 22 de Octubre de 1956, el Concejo Nacional de Educación, había resuelto oficialmente instituir en el calendario escolar el Día del Padre, disponiendo que se conmemore el día 24 de agosto en todos los establecimientos educacionales del país, pero por presiones de interés económico nunca se ejecutó.
Solo en las escuelas de la provincia de Mendoza, se mantuvieron fieles al Libertador al celebrarlo y es la única provincia que lo hace en esta fecha, de acuerdo a lo establecido por Ley 5131/87, reglamentado por Resoluciones 316/2000 y 774/2001, además el Honorable Concejo Deliberante del partido de General San Martín, provincia de Buenos Aires por Resolución (expediente 394-CC-2008) instituyó que en todo el territorio de ese partido el día 24 de agosto de cada año, como Día del Padre Argentino.
El sable corvo de San Martín, flanqueado por granaderos en el Museo Histórico Nacional / Andres D’Elia.
Desde hace algunos años ya, la Fundación Marambio, está machacando para que se celebre el Día del Padre en la Argentina el 24 de agosto de cada año, en homenaje al General San Martín en lugar de hacerlo como hasta ahora en homenaje a un padre norteamericano. A grandes rasgos, el festejo tradicional se origina en 1909, cuando Sonora Dodd decidió homenajear a su padre, Willian Dodd: un veterano de la guerra civil estadounidense. Posteriormente, Lyndon Johnson estableció como fecha conmemorativa el tercer domingo de junio.
Montañas De Argentina se suma desde 2019, pero necesitamos la ayuda y difusión de tod@s.
Juntos
podríamos lograr que este deseo de muchos argentinos, se haga realidad.
En 1824 ya en Francia, el General San Martín se ocupó de reeducar a su hija Mercedes Tomasa, y entre otras cosas escribió estas Máximas en el año 1825. Estas representan un compendio de principios y límites de todo hijo y constituye un verdadero plan educativo de índole moral.
José de San Martín y su hija Merceditas | Escultura en la Alameda de Mendoza (Archivo / Los Andes)
MÁXIMAS PARA MI HIJA:
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Humanizar el carácter y hacerlo sensible aun con los insectos que no perjudican. Stern ha dicho a una mosca abriéndole la ventana para que saliese: «Anda, pobre animal, el mundo es demasiado grande para nosotros dos».
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Inspirarle amor a la verdad y odio a la mentira.
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Inspirarla a una gran confianza y amistad pero uniendo el respeto.
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Estimular en mercedes la caridad con los pobres.
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Respeto sobre la propiedad ajena.
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Acostumbrarla a guardar un secreto.
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Inspirarle sentimientos de indulgencia hacia todas las religiones.
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Dulzura con los criados, pobres y viejos.
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Que hable poco y lo preciso.
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Acostumbrarla a estar formal en la mesa.
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Amor al aseo y desprecio al lujo.
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Inspirarle amor por la Patria y por la Libertad.
+ Acerca del cruce de los Andes, desde AQUI
+ 7 Granaderos, desde AQUI
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del Padre
